Los diamantes en tonalidades verdes son tan difíciles de encontrar que muchas personas no conocen ni siquiera de su existencia. Son frecuentemente confundidos con otras gemas preciosas como la esmeralda. Su raro color es casi imposible de conseguir de forma natural y solo unos pocos son introducidos al mercado cada año. 

Se extraen principalmente en minas de África y Sudamérica. A pesar de no ser tan escasos como los Fancy Pink, Blue o Red, las piedras que poseen color de suficiente calidad para ser convertidos en gemas, representan un porcentaje mínimo.

Su verde matiz es producido por la exposición a la radiación natural durante su proceso de formación. La radiación afecta la estructura atómica del carbón, creando vacíos en la estructura molecular del diamante. Estos vacíos absorben la luz azul y roja, causando que ésta se refleje en tonalidades verdes. 

En la mayoría de estos diamantes, el color suele concentrarse en la superficie de la piedra. El diseño y el corte deben ser cuidadosamente estudiados para lograr preservarlo. En algunos casos, el color es tan superficial, que el Fancy Green en bruto, se convierte en un diamante incoloro después del proceso de corte. 

Determinar la procedencia de su coloración ha resultado ser un reto para los gemólogos. Existe una gran cantidad de diamantes que son teñidos de verde imitando con precisión los procesos naturales, por lo que distinguir el color natural del artificial es considerado todo un desafío.  

Incluso en ocasiones el tallador, al pulir estas gemas, deja un pequeño fragmento en bruto entre el filetín y el pabellón, facilitando al gemólogo su reconocimiento como natural y que éste sea reflejado en su certificado. 

Intensidades de Verde

Al igual que con todos los diamantes de colores, la intensidad de sus matices determina el valor de la piedra. Son calificados con los descriptores del instituto de Gemología Americano en: Faint Green, Very Light Green, Light Green, Fancy Light Green, Fancy Green, Fancy Intense Green y Fancy Vivid, Fancy Deep o Fancy Dark Green.

Colores Secundarios

El color verde suele también estar acompañado por tonos secundarios, que son por lo general el Yellow, Grey, Blue, Orange y Brown. Pueden presentarse solos o hasta en combinaciones de dos. 

De los diamantes Fancy Green revisados en la última década por el Instituto Americano de Gemología (G.I.A, por sus siglas en inglés), han sido en su mayoría yellow / yellowish green o pure green. 

Comprar un diamante de color verde sin tonos secundarios y con altos grados de intensidad suele significar una inversión importante (además de ser difíciles de encontrar). Si se desea adquirir una de estas hermosas joyas, apostarle a tonalidades más claras es la mejor opción para conseguir propuestas más accesibles. 

El Dresden Green 

El Dresden Green, es un increíble diamante de intensidad Fancy Vivid, de 41 carats y de más de tres siglos de antigüedad. Se conoce de su existencia desde 1722 y se presume fue encontrado en la India años antes. 

Fue cortado en forma ovalada y su claridad es VS1, con potencial de convertirse en Flawless si es pulido nuevamente. Además de estas cualidades, fue clasificado como Type IIa, la cual se asigna únicamente a los diamantes químicamente más puros. 

El Dresden Diamond se destaca también por la uniformidad de su color, lo que es una verdadera rareza en un Fancy Green de origen natural. 

Es la pieza central de un antiguo adorno para sombrero y actualmente está expuesto al público en el castillo Dresden de Alemania. Ha sido tanto el deseo por admirar esta maravillosa joya, que la han trasladado a través de museos alrededor del mundo para su muestra. 

Amor Verde

El Fancy Green no es un diamante comúnmente utilizado para los anillos de compromiso, sin embargo, su singular belleza puede dar vida a piezas incomparablemente hermosas. 

Los diamantes con tonalidades verdes significan vida, naturaleza y prosperidad. Un compromiso sellado con esta preciosa piedra puede usarse para representar los inicios de una nueva vida a lado de quien amas.